martes, 26 de junio de 2018


TERTULIA POLÍTICA

Voto parejo / dictadura
 (…) si mi voto fuera para Andrés Manuel y Cuauhtémoc Blanco
para el senado no voy a votar por Lucía Meza, hacerlo beneficiaría
a los intereses de Rodrigo Gayosso y (…) Elena Cepeda,
esa mujer con piel aterciopelada y hocico de carretonero
o borracho buscapleitos, ya ni siquiera de Graco, que ya es un viejo enfermizo y con el corazón destartalado

Pedro Martínez Serrano
El candidato presidencial mejor posicionado, Andrés Manuel López Obrador recorre el país, pidiendo el voto parejo, porque dice que “el voto no es por una persona sino para transformar al país”, por lo que rechaza el sufragio cruzado y, una y otra vez pide, exige a sus simpatizantes el voto 'parejo', para todos los candidatos de la coalición Juntos haremos historia.
        El llamado de Andrés Manuel lo retoman lo mismo los priístas que los panistas; llaman también al voto útil, buscando que el segundo lugar se beneficie del descontento, poco o mucho, que exista en contra del tabasqueño.
        Ambas ocurrencias me parecen una irresponsabilidad; la primera, porque invita, atiza el ánimo a construir una dictadura, en donde, como en los mejores momentos del Maximato priísta, el Congreso de la Unión; los congresos locales, se convierten en circos, en los que sus integrantes pelean, compiten por complacer “al jefe”.
        Y no hay que ir muy lejos por la respuesta sobre lo que ocurre cuando el congreso se arrodilla, en este caso, al gobernador en turno, el también tabasqueño Graco Ramírez quien, habilidoso, tramposo y acostumbrado a transitar por los caminos del soborno y la extorsión, convirtió a la actual legislatura en una caricatura mal hecha de la pluralidad y el equilibrio de poderes.
        Todos y cuando digo todos, es todos los diputados de la actual legislatura le entraron al maiceo, que coordinó primero Francisco Moreno Merino, luego Jaime Álvarez Cisneros y, más reciente, la diputada Hortensia Figueroa Peralta, junto con Julio Espín Navarrete.
        Cada cual en su momento, ha entregado maletines llenos de billetes, en cantidades que van de acuerdo al nivel de cada uno de los que los reciben; quien nunca ha tenido, con migajas se conforma y quienes nacieron en pañales de seda como Mario Chávez Ortega, recibieron dinero, pero también favores, dejando de lado, orinando arriba de la estirpe de que es heredero: nieto de Lauro Ortega Martínez.
        Si con todo y el voto diferenciado, hay que ver lo que nos ha pasado en Morelos, en donde Graco Ramírez endeudó y saqueó al estado; golpeó políticamente a presidentes municipales y adversarios políticos; todo lo hizo sin contrapesos, con un Congreso perruno, sometido y complaciente a los caprichos no solo del gobernante, también de su esposa, la señora Elena Cepeda, esa mujer con piel aterciopelada y hocico de carretonero o borracho buscapleitos; los diputados, todos, absolutamente todos fueron serviles, agachones y cómplices de los desplantes, propios de los de su tipo, de Rodrigo Gayosso Cepeda quien, por cierto, se prepara para huir de nuestra entidad.
        El llamado al voto parejo, me parece un contrasentido de la democracia; veamos: para presidente de la república, hay que votar por quien uno crea que es el mejor, pero que él lo sea, no quiere decir que, por ejemplo, en el PRI, Carlos Romero Deschamps, el dirigente del sindicato petrolero lo sea; él, Romero, al amparo del poder ha saqueado hasta hartarse; como lo hicieron en su momento Elba Esther Gordillo, hoy una de las operadoras de Andrés Manuel López Obrador quien, de un plumazo ha purificado a hamponsetes probados; en el PAN, el ladrón, el corrupto y socio de grupos criminales, es nada menos que el candidato presidencial, Ricardo Anaya Cortés sobre quien, la red está inundada de grabaciones pidiendo dinero y favores para proteger a delincuentes.
        Volviendo a Morelos, claro que bajo ninguna circunstancia voy a votar de manera uniforme; si mi voto fuera para Andrés Manuel y Cuauhtémoc Blanco, para el senado no voy a votar por Lucía Meza, hacerlo beneficiaría a los intereses de Rodrigo Gayosso, ya ni siquiera de Graco, que ya es un viejo enfermizo y con el corazón debilitado.
No votar por Lucía afectará a Ramsés Salazar, pero ni modo, es el precio de las coaliciones, en las que se infiltran basura y traiciones. Obvio que tampoco votaré por el candidato del PRI, Verde y Nueva Alianza, Ángel García Yáñez, un narcotraficante de poca monta que desde sus años de alcalde en Zacualpan de Amilpas, operaba una red de vendedores de cocaína. Ahí la afectada será la joven política priísta Lilia Ibarra.
En la diputación federal, si mi voto es en Cuernavaca, tengo la alternativa de Daniel Altafi, un candidato independiente, verdaderamente ciudadano e interesado en servir; creo que nadie más vale la pena para recibir mi voto. Creo que todos son oportunistas, advenedizos y cómplices de Rodrigo Gayosso; hay que revisar las historias y relaciones de familia y ahí nos vamos a dar cuenta.
Claro que en el distrito IV, aunque votara por Andrés Manuel y Cuauhtémoc, jamás lo haría por el “padrotillo” Jorge Argüelles, el imbécil que propuso que Belinda, la cantante defraudadora, se hiciera cargo de la comisión de rescate de los afectados de los sismos.
En Morelos, se repite la película de las diputaciones locales y candidatos a alcaldes, hay advenedizos que por haberse mudado a las siglas de la coalición Juntos haremos historia, se sienten purificados, santificados y ganadores, pero hay que tener cuidado primero anular mi voto, que dárselo a ladrones, como muchos que irán en las boletas.
Lo que me queda claro, perfectamente claro, es que ninguno de mis votos será para nadie de quienes tengan la menor, la más mínima cercanía con Rodrigo Gayosso, el “Gayo-Ladrón” infiltró a todos los partidos, sobornó dirigentes y ha ensuciado el proceso, con un solo objetivo: evadir la cárcel de alta seguridad que lo espera pronto, muy pronto.
El voto parejo es un retroceso democrático, sobre el que hay que tener mucho cuidado.

jueves, 21 de junio de 2018

TERTULIA POLÍTICA

Bolaños el ladrón

Pedro Martínez Serrano
El candidato del PAN a la presidencia municipal de Cuernavaca, Javier Bolaños Aguilar, es un sujeto que vive del sablazo, del quinto real (el 20 por ciento de comisión de las obras que consigue) y, proclive a la complicidad con representantes de grupos criminales que, con la careta de empresas de operación y ejecución de obras de agua potable, constituyen el llamado “Cartel del agua”, a través del cual cobran piso en decenas de municipios del país.
         El asunto viene a tema, porque hoy, luego de que el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena-PES-PT), Cuauhtémoc Blanco denunció públicamente a Bolaños como un vulgar ladrón, el veracruzano con problemas de pederastia y vinculado a desvíos millonarios de recursos en el gobierno del Estado, intentó lavarse la cara a manotazos de estiércol. Trató de mostrarse como que muy honestito, Lo que no es.
         En su paso por la actual legislatura federal, Edmundo Bolaños Aguilar, consiguió recursos para la ejecución de obras en Cuernavaca, aunque la mayor parte de los mismos, los redireccionó a municipios gobernados por el PAN, con un solo propósito: asignar los contratos a cómplices que facturan y subcontratan a improvisados y chambones de la construcción.
         Los operadores de Bolaños en la repartición  del dinero, es Javier López Sánchez, que vivió sus mejores años en la administración del desflemado ex gobernador Marco Antonio Adame Castillo, cuando como Director de Comunicación Social, se enriqueció con el fifty-fifty, su condición del mitad y mitad, para autorizar facturas a periodistas y vividores que lo rodean. El otro es Jesús Martínez Dorantes, incluido como candidato a regidor, destinado a no entrar en la fórmula con la que el veracruzano busca la presidencia municipal de Cuernavaca.
         Hipócrita y santurrón, como es, traicionero y mentiroso como sella su actuación, Javier Bolaños olvida que a su llegada a Morelos, allá por el 97, traía una mano atrás y otra adelante para cubrirse; acostumbraba gorrear la comida y los tragos en el círculo de amigos de Sergio Estrada.
         Bastaron unos meses al frente del SAPAC, para que Bolaños empezara a vivir como siempre quiso, con dinero y gustos de millonario, como coleccionar autos de lujo del año. Especialmente los de la Ford, los Cougar y los Thunderbird. Tenía de todos los colores y algunos de edición especial.
         Sobre Edmundo Javier Bolaños Aguilar, he escrito en diferentes oportunidades, voy a trascribir la Tertulia Política del 30 de septiembre de 2014 y, también, el despacho de CAUCUS, la columna del periodista Alberto Millán en el Sol de Cuernavaca, en el que recuerda el proceso administrativo y de responsabilidades iniciados desde 2007 contra Javier Bolaños, bajo el número de expediente ASG/UAJ/PAR/118/07-12, por el desvío multimillonario de recursos en que incurrió:

TERTULIA POLÍTICA

Basura-Bolaños Aguilar

Acostumbrado a la pestilencia de drenajes y basureros, sobre cuyos deshechos construyó su millonaria fortuna, el veracruzano Edmundo Javier Bolaños Aguilar, busca hoy convertirse en candidato a presidente municipal de Cuernavaca por el PAN, pero antes y desde la presidencia de la Junta Política del Congreso local, prepara el millonario enjuague que lo capitalizará para ir en busca de aquella aventura política en la que se pretende embarcar.
El negocio que le dejará los millones necesarios para comprar la candidatura a la alcaldía, como él mismo fanfarronea con sus amigos de la legión veracruzana, va a salir de la negociación que hizo con el abogado de la Promotora Ambiental (PASA), Guillermo Pasquel Hernández.
Para complacer a Pasquel, el diputado local Javier Bolaños Aguilar sólo debió dar entrada a la demanda de juicio político en contra del doctor Jorge Morales Barud, con cuya acción, quien en su momento también representó al ex gobernador Sergio Estrada Cajigal y a los delincuentes que lo acompañaron en su gobierno, busca recuperar un adeudo que arrastra el ayuntamiento de Cuernavaca, con la Promotora Ambiental.
Atizar el escándalo en contra del ayuntamiento de Cuernavaca y de quien lo preside, tiene un doble propósito de parte de Bolaños: servir a los intereses de la Promotora Ambiental y de los socios de la empresa en Cuernavaca, encabezados por Sergio Estrada, pero también, conseguir la comisión prometida en millones de pesos, además del posicionamiento mediático.
La desfachatez y cinismo con que actúa Edmundo Javier, lo llevó a exhibirse con Pasquel Hernández, el abogado defensor de los delincuentes que trabajaron en el gobierno del Sergio Estrada, como José Agustín Montiel López y el mismo ex gobernador Estrada.
Me dicen que el diputado veracruzano que coordina a los panistas en el Congreso del Estado, se sentó hasta en dos ocasiones (viernes 5 y jueves 11 de septiembre) en el Italian Coffee de la colonia Antonio Barona, ubicado sobre el libramiento de la Autopista México Cuernavaca. Tengo información altamente confiable de que los encuentros se multiplicaron, hasta tres veces, en el domicilio particular de Bolaños Aguilar.
Las reuniones entre Bolaños Pasquel, previos a la presentación de la demanda de juicio político en contra del presidente municipal Morales Barud,en algunos de los cuales estuvieron personajes cercanísimos a Sergio Estrada y gente que estuvo vinculada a Sistema Integral de Recolección de Basura de Cuernavaca (SIREC), sirvieron para que entre carcajadas y dicharachos, se preparara la embestida en contra del ayuntamiento y su alcalde.
Los acontecimientos que advierten el recrudecimiento del golpeteo político en contra de Morales Barud, son y serán orquestados desde la oficina en el Congreso del Estado y la residencia particular de Javier Bolños, el veracruzano ladrón que saqueó al Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) y más tarde a la Comisión Estatal de Agua y Medio Ambiente (CEAMA).

Por cierto, sobre la corrupta vida política de Edmundo Javier, encontré la siguiente entrega de CAUCUS, la columna que publica el periodista Alberto Millán en el Sol de Cuernavaca:

Javier Bolaños: bajo proceso

5 de febrero de 2008

El futuro político del diputado federal del PAN en Morelos, Javier Bolaños Aguilar, está en proceso de diluirse, frente a los actos de corrupción que cometió como ex titular de la Comisión Estatal de Agua y Medio Ambiente (CEAMA) y que lo pusieron bajo proceso administrativo y de responsabilidades ante la Auditoría Superior Gubernamental.
La ejecución de ambos procesos por parte del auditor Gerardo Casamata, que podrían derivar en acciones penales en contra de Javier Bolaños, era cuestión de tiempo, pues todos conocen de los excesos que cometía el actual diputado federal con los recursos públicos asignados y recaudados por la CEAMA.
Son cerca de 200 millones de pesos los que Javier Bolaños no ha podido comprobar en qué fueron gastados, pero que todo mundo sabe su paradero: negocios personales con el ex gobernador Sergio Estrada Cajigal.
De acuerdo a los recientes informes de la Auditoría Superior Gubernamental, dirigida por Gerardo Casamata, el proceso administrativo y de responsabilidades iniciados desde el año pasado contra Javier Bolaños, bajo el número de expediente ASG/UAJ/PAR/118/07-12, podría concluir este mismo año con serios impactos de tipo penal.
Se trata del resultado de la auditoría practicada a la cuenta pública estatal del 2006, específicamente del periodo del primero de enero al 3 de abril de ese mismo año, en el que se detectó un faltante de 97.4 millones de pesos cometidos directamente por Javier Bolaños y que no ha podido solventar.
Gerardo Casamata descubrió que de esa cantidad de recursos, 52.4 millones de pesos se destinaron al pago de finiquitos, de los cuales no se encontró documentación comprobatoria; además de que resultaban improcedentes, porque correspondían al ejercicio del 2005.
Los otros 45 millones de pesos no solventados por Javier Bolaños, tienen que ver con el pago de gratificaciones que no fueron autorizadas por la Junta de Gobierno de la CEAMA y que, por lo tanto, son improcedentes. Además de que no están debidamente sustentadas.
Por si fuera poco, dentro de sus excesos y abusos, el diputado federal panista Javier Bolaños Aguilar, como ex titular de la CEAMA cometió serias violaciones constitucionales, ya que no sólo adjudicó más del 20 por ciento de su presupuesto a través de licitación restringida, sino que también cometió irregularidades de planeación y ejecución de obras que violaron el artículo 40 de la Ley de Obras Públicas y Servicios.
En forma indirecta, está involucrado en el desvío de otros 102 millones de pesos cometido por su sucesor en la CEAMA, Adolfo Lizárraga Fontes, quien prácticamente fungía como títere del veracruzano Bolaños Aguilar. Durante la gestión de Lizárraga Fontez no se movía nada de dinero sin la autorización de Bolaños.
Bajo el procedimiento ASG/UAJ/PAR/119/07-12 ejercido contra Adolfo Lizárraga, se desprende que 96.9 millones corresponden al pago de facturas que no reúnen requisitos fiscales y 5.5 millones a comisiones bancarias no procedentes, por concepto de devoluciones de cheques.
Frente a esos elementos de corrupción imputados a Javier Bolaños, que por supuesto no son nuevos, ni desconocidos por los morelenses, es probable que se realicen pronunciamientos de desmarque político que dejarán sólo al diputado federal.
Y es que el propio Bolaños Aguilar a dicho fuerte y quedito, en público y en privado, que el auditor Superior Gubernamental, Gerardo Casamata, no va actuar en su contra por tener la protección del actual gobierno, a través de las supuestas relaciones que aún guarda con su socio Sergio Estrada Cajigal.
Incluso, Bolaños Aguilar ha tenido la intrepidez de amenazar a algunos comunicadores de tenerles listos sus expedientes. Los cierto es que para algunos Javier Bolaños podría ser una piedra en el zapato, pero para la mayoría es un diputado federal sin ningún futuro político en Morelos, precisamente por sus negros antecedentes que manchan la política y el ejercicio público.
Bolaños Aguilar se siente seguro del manto de impunidad que lo cobija, pero lo que no ha calculado, es que era cuestión de tiempo revelar su expediente, ante su desenfrenada imaginación de querer ser diputado local o hasta alcalde de Cuernavaca.

lunes, 18 de junio de 2018

TERTULIA POLÍTICA

Caballos de Troya

Pedro Martínez Serrano
A medida que se aproxima el 1 de julio, la memoria de los electores empieza a olvidar, que muchos de los que hoy se dan golpes de pecho, juran lealtad y secundan “hasta con su propia vida” los ideales de Andrés Manuel López Obrador, no son más que “pájaros de cuenta” “Caballos de Troya”, infiltrados que cumplen un solo propósito: servir a lo que el próximo presidente de la república llama la “mafia del poder.
        Y aunque el listado es largo, hay dos casos que ilustran la infiltración de Graco Ramírez y los intereses que a él representan, en el proyecto alternativo de nación que busca encabezar López Obrador: los perredistas “arrepentidos”, Lucía Meza Guzmán, ahora candidata a senadora y el candidato a diputado local por el segundo distrito, Héctor Javier García Chávez quien, además de ser proclive a la pederastia, por cuyo delito ha sido denunciado, es nada menos que el ideólogo, el consultor estrella de la campaña de Rodrigo Gayosso. Él fue el de la idea de “Morelos tiene Gayo”.
        De Lucía Meza, responsable directa del cabildeo para el endeudamiento del Estado, para beneficio de Graco y su hijo, Rodrigo Gayosso, hoy candidato a gobernador por el PRD, sólo se debe decir que fue ella la responsable de tender las redes de encubrimiento de la pestilente corrupción en que se sumergió a Morelos a partir de 2012.
        Lucía Meza, rabiosa, vulgar y bajuna critica de Andrés Manuel López Obrador, a quien no se cansaba de pendejear y ningunear, hoy se da golpes de pecho y “ofrenda la vida” por el tabasqueño, cuando en el terreno de los hechos, sigue cobrando en la “Nómina Gayosso”, a quien ha servido en la movilización en la región de los altos y el poniente del Estado, por medio de su esposo, un tal Ricardo Robledo.
        El otro de los infiltrados, destinado a modificar los equilibrios legislativos, para jugar las contras al próximo gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo, jalando diputados a la causa perredista, es Javier García Chávez, actual diputado federal y candidato a la diputación local por el segundo distrito.
        El mismo que votó a favor del gasolinazo, esa decisión incendiaria en agravio de la economía de los mexicanos, tema que condena con energía Andrés Manuel, es quien a trasmano coordina los sótanos de la rabiosa guerra sucia que se mantiene en contra de Cuauhtémoc Blanco; El Gato, como le agrada que le llamen, se reúne en un domicilio de la colonia Vista Hermosa, con “los estrategas” de Rodrigo Gayosso, Jorge Meade y Víctor Caballero. Quien lo secunda en el trazo de las rutas, es Jaime Álvarez Cisneros, el coordinador del candidato panista y del MC a la gubernatura.
        La misión que cumple el PRI, su candidato, Jorge Meade, desde la profundidad del quinto lugar en la preferencia electoral, es pegar el “madrazo mañanero” a Cuauhtémoc Blanco; quien dicta las líneas es precisamente el Gato y quien toma nota de las mismas, es uno de los gatos del ex delegado de Sedesol en Morelos quien, por cierto, creo que está quemando naves para llegar el puerto al que aspira: buscar la negociación para reconocer el triunfo de aquel a quien hoy crucifica.
        El Gato, ese sujeto perverso y traicionero, que ha pavimentado su ascenso al poder, aplicando la política de la bicicleta: pateando a los de abajo y agachándose con los de arriba, se encuentra frente a la exhibición de un largo listado de abusos en agravio de niñas morelenses, pero también frente al riesgo de que su principal activo, Cuauhtémoc Blanco lo deje caer; que lo desmarque de aquellos a favor de quienes pide el voto.

sábado, 16 de junio de 2018


TERTULIA POLÍTICA

Enrarecimiento electoral / Sálvese quien pueda

Graco Ramírez es un sujeto sin escrúpulos, que asciende
al poder, vendiendo movimientos, vendiendo familiares
y vendiéndose él mismo; todo antes que perder; todo antes
de ponerse en riesgo; la difamación, la denostación
y el golpeteo mediático son lo suyo y sabe perfectamente cómo hacerlo.
A partir de esta semana, empezó a operar de la mano
de su jefe de policía Alberto Capella Ibarra

Pedro Martínez Serrano
El todavía gobernador Graco Ramírez está acorralado, sabe que su hijastro; su hijo Rodrigo Gayosso está condenado a perder la elección del domingo 1 de julio. Su verdugo; el verdugo que ellos mismos construyeron a su gusto, será Cuauhtémoc Blanco Bravo,  el futbolista, como llaman despectivamente al candidato que ha aglutinado a representantes de todos los sectores.
        La encuesta más reciente a la que tuve acceso, elaborada por un grupo de profesionales que no aceptan “cuchareo”, coloca a Blanco Bravo casi 25 puntos arriba de Rodrigo Gayosso, que apenas alcanza 12.86 puntos de aceptación, contra los 37.25 del presidente municipal de Cuernavaca con licencia.
        El tema toca indicadores de gravedad, de alarma, de terror electoral, si se toma en consideración que es el mismo Graco Ramírez quien se puso a la cabeza de la operación del “war room” de Rodrigo Gayosso; el golpeteo mediático lo ordena Graco y lo ejecuta Alberto Capella, el socio de Carlos Marín, director general de Milenio y también con intereses económicos fuertísimos en Reforma y las televisoras Televisa y TV Azteca.
        La aparición de mantas “del crimen organizado” y las filtraciones mediáticas, son posibles sólo con el apoyo del comisionado de seguridad pública, Alberto Capella, ahí está la exclusiva que cacareo Carlos Loret de Mola, en la que un sicario reparte estiércol a diestra y siniestra. Menciona a quienes preocupan a Rodrigo: Alfonso de Jesús Sotelo Martínez Ponchito, el mismo que será diputado por Jojutla, contra la voluntad de Graco y Rodrigo.
        La manta de los Rojos y las leyendas de AMLO si, Cuau no, tienen la autoría de Manolo Agúero, el mismo con el que operan los “huérfanos” del peligrosísimo Negro, esos que por 5 mil pesos matan a una persona o, cuando menos, amenazan
        Lo que orquestó Graco el viernes en Televisa, me hizo recordar el tema de Federico Figueroa, en contra de quien filtró la declaración de un hamponcete de medio pelo; un “testigo protegido”, que acusó al empresario de tener nexos con el crimen organizado.
        Lo mismo hacen hoy Graco y Rodrigo Gayosso, a quienes no están con ellos los acusan de todo, hasta de sus iguales: de criminales.
        Así las cosas, me parece que, lo peor está por venir y los responsables de lo que ocurra o deje de ocurrir tienen nombre y apellido: Graco Ramírez y Rodrigo Gayosso:

domingo, 10 de junio de 2018

TERTULIA POLÍTICA

Drogas, debate y elección

Pedro Martínez Serrano














El debate que se realizará hoy entre los candidatos a la gubernatura del Estado, ofrece muchos temas a revisión, entre los que destacan los siguientes:
        1.- El resultado del mismo y el que salgan a declararse ganadores, Víctor Manuel Caballero del PAN; Jorge Meade Ocaranza, del PRI y/o cualquier otro, como la señora Nadia Luz Lara (que no ha generado absolutamente nada, más que lástima y risa, por el ridículo a que se ha sometido), no modificará absolutamente en nada la decisión del voto, ya tomada por los morelenses.
        Los tres anteriores, Caballero, Meade y Nadia son alfiles que se moverán al ritmo ya acordado con los operadores de Graco Ramírez, con un solo propósito: hacer lucir a Rodrigo Gayosso, aunque para complacerlo, tengan que ser sometidos a uno que otro cuestionamiento de trámite.
        2.- De los contendientes por la gubernatura, el hijo de Graco Ramírez, de sobra conocido por su adicción a la cocaína, es un consumidor permanente de ansiolíticos (diazepam y clonazepam, sus preferidos), con cuyo suministro se le controla la ansiedad, la bipolaridad y la esquizofrenia, enfermedades mentales que padece. El doctor Alfredo Aguirre, experto en el tratamiento de adicciones, diagnostica al señor Gayosso, como un sujeto peligroso y proclive a la agresividad; es tan riesgoso acercarse a él, como cuando alguien desatiende la recomendación de no acercarse a alguien, porque anda armado.
        3.- Jorge Meade Ocaranza, en su asalto al control del priísmo en Morelos, llevará la penitencia, ni siquiera los priístas votarán a su favor; no sólo eso, le tienen preparada una campaña con datos duros; por ejemplo las millonarias desviaciones en que incurrió en Sedesol; los abusos y acoso sexual en que incurrió, en agravio de muchas jovencitas y atractivas mujeres que buscaron ingreso o trabajaron bajo su mando. Lida Quintero, es el fantasma que corretea “al fraile” en su campaña en busca de perder y… Negociar.
        Porque al final, y es especialista en el tema, Jorge Meade va a abandonar a Gayosso y a Graco y, desde el control del PRI, va a buscar interlocución con Cuauhtémoc Blanco, para luego de levantarle la mano, “recuperar los gastos de la campaña”. A Jorge no le interesa la gubernatura, lo que le interesa, son los dividendos que le generará la derrota. Perdiendo gana. Lo ha hecho siempre.
        4.- Víctor Manuel Caballero, saldrá hoy en el debate en una primera intervención, tratando de anular a Rodrigo Gayosso, para verse favorecido con el efecto que ha trabajado: ser el plan B de Graco y, apoyado por su coordinador de campaña, Jaime Álvarez y su patrocinador y socio de Graco, Víctor Sánchez, empujar la utilidad del voto a su favor, aunque hay que anotar que ni juntos, Gayosso, Caballero, Meade, Nadia Luz y, de pilón, el desflemado y desteñido ex rector, Alejandro Vera, le ganarán la elección al futbolista.
        Diría un especialista que trabaja al servicio de Gayosso, que es mi amigo hace más de una década: si cometieran la pendejada de unirse, más duro sería el madrazo que les propinará Cuauhtémoc Blanco Bravo, porque en automático se aumentaría su preferencia electoral.
        Así las cosas, el debate de hoy, no es más que un evento de trámite, en el que Cuauhtémoc, que controla mejor que cualquiera la adrenalina, podrá equivocarse a placer, porque ya ganó.

viernes, 8 de junio de 2018


TERTULIA POLÍTICA

Israel Reyes, ladrón y traicionero

Pedro Martínez Serrano
La Federación de Estudiantes Universitarios de Morelos (FEUM), ha sido semillero político de cuando menos media docena de quienes la han presidido; otros tantos, han pasado por ese cargo con más pena que gloria y, aunque todos ellos, en la forma han defendido los intereses del estudiantado, el caso del sujeto llamado Israel Reyes Medina constituye un caso aparte, atípico.
Y es que aunque su aspecto es el de un sujeto apocado, cobarde y pusilánime, Israel Reyes jugó al beneficio personal y, la ambición con la que pavimentó su camino, lo llevó a caer en todo tipo de tentaciones; respondió siempre al llamado del dinero. Terminó haciendo todo por dinero.
Recuerdo que el día que lo conocí, recién electo presidente de la FEUM, vestía un pantalón blanco de terlenka, esa fibra sintética y corriente y por corriente barata; zapatos negros ya maltratados, con un desgaste que acusaba el paso de los años; una camisa que algún día fue amarilla, pero el tiempo la dejaba ver casi transparente. Su saco, también modelo 70, era motivador, a la risa; me hizo recordar a Clavillazo.
Pocos meses después volví a ver aquel muchacho apocado, pero ya con algunas garras de mejor calidad y, eso sí, con un par de ayudantes de su calaña y tipo. Estaban en el bar de un restaurante de medio pelo, pidiendo tragos y ordenando, como si el cargo de Israel Reyes, les hubiera dado derecho a gritonear y a ningunear gente.
En esa ocasión, el ahora candidato a diputado local por el tercer distrito, el tal Reyes Medina esperaba al directivo de una de las marcas de cerveza más populares, quien antes de llegar a su cita, me saludó y me comentó al oído: “lo que hay que hacer por la chamba; mira que soportar a estos hijos de la chingada extorsionadores… Le traigo un dinero (20 mil pesos) que le damos mensuales, para que controle a sus muchachos y no anden asaltando camiones repartidores”.
No le di importancia al tema; el cobro de piso era lo suyo, es más hasta lástima sentí por él; pensé: alguien que uso zapatos regalados hasta ya entrada la adolescencia, como él mismo me platicó, se ha de sentir bien, recibiendo dinero en el que jamás soñó.
Hasta ahí el asunto de la cervecería Modelo; pero el tema se repetía con la Moctezuma; con la Coca Cola, con los operadores de las tiendas OXXO y con muchas empresas más, a las que el ahora candidato del PRD a diputado local, les cobraba piso.
Más:
Empresas operadoras de transporte urbano y foráneo, “cooperaban para el programa de becas de la FEUM”, un argumento más sobado, que las piernas de una prostituta, pero muy efectivo para extorsionar a empresarios.
El ejemplo a la mano:
Ómnibus coordinados transportación y turismo, entregaba al presidente de la FEUM el equivalente a 240 mil pesos al año, para que los estudiantes del oriente de la entidad se trasladaran a sus centros de estudios; lo mismo hacían los directivos de la Estrella Roja, entregar su parte, para favorecer la educación de los jóvenes morelense.
El problema le explotó en la cara a Israel Reyes Medina, ahora que como candidato del PRD al tercer distrito, impulsado por Rodrigo Gayosso, quien así le paga las traiciones a la UAEM, intentó extorsionar a un grupo de transportistas, a quienes pidió medio millón de pesos, para la campaña.
Uno de los participantes en la reunión, asegura que Reyes Medina amenaza: recuerden que el gobierno de Graco Ramírez no ha terminado, y no creo que quieran tener problemas.
Y aunque las posibilidades de triunfo son nulas, el ex presidente de la FEUM, anda extorsionando empresarios, con el cuento de la campaña, “para puro embolsarse el dinero, porque sabe que no va a ganar”.

martes, 5 de junio de 2018


TERTULIA POLÍTICA

Gayosso un vulgar ladrón

Pedro Martínez Serrano
Desde su aparición en Morelos, concretamente en Cuernavaca, en el periodo de gobierno de Manuel Martínez Garrigós (2009-2012),  Rodrigo Gayosso vino a hacer lo que sabe: atarragarse de dinero mal habido. Y aunque hoy se da golpes de pecho y ofrece lo que no hizo en 6 años, que en realidad gobernó, dejando de lado al pusilánime Graco Ramírez, su verdadero interés de mantener el control del gobierno estatal, es seguir saqueando a placer.
        Lo anterior viene a tema, porque hoy me encontré algunos apuntes que he almacenado durante años, sobre el Gayo-Ratón, como lo llama mi amigo Juan Jaramillo Frikas; va como hoja suelta, de muchísimos datos que hay que mostrar, para que no olvidemos quién ha sido el peor ladrón que ha llegado a Morelos:
        Aquí la carnita:
Rodrigo Gayosso fue designado por su amigo y socio de negocios Manuel Martínez Garrigós, como Secretario General del Ayuntamiento y posteriormente como Secretario de Desarrollo Social del Ayuntamiento de Cuernavaca, del 2009 al 2012.
Al amparo de lo anterior, Rodrigo Gayosso recibió millonarias comisiones por distintos contratos de obras, servicios y adquisiciones, que logró que le fueran asignadas a empresarios afines y prestanombres, ganancias que compartió con el propio Martínez Garrigós y con varios funcionarios del ayuntamiento.
Desde entonces, Gayosso logró estructurar una vasta red de operadores financieros, tanto en nómina municipal como externos, a través de los cuales pudo realizar millonarios negocios. Algunos de esos funcionarios que fueron sus cómplices se enlista a Rafael Eduardo Rubio Quintero, titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas; Pedro Román Castañeda, Director de Fraccionamientos de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas; Carlos Arturo Bermúdez Pureco, Subdirector de la Coordinación General de Finanzas; Emmanuel Alexis Ayala Gutiérrez, Jefe del Departamento de Atención a la Juventud; Andrik Ruiz de Chávez Arista, Subsecretario de Turismo; entre otros.
Para cerrar la pinza. Rodrigo operó para que se le asignaran distintos contratos, algunos adjudicados de manera directa, a empresas vinculadas con su padre biológico, Guillermo Gayosso, principalmente a “GRUPO WYN S.A. DE C.V.”, con RFC GWN950123NQ2, cuyos socios oficiales y representantes legales son Rodolfo Ernesto Roura Castilla y Blanca Rosa Torres Luján.
A la empresa de la que su padre Guillermo Gayosso fungió como cabildero, le fueron adjudicados contratos por más de 131 millones de pesos, de los que Rodrigo y su progenitor recibieron el 25 por ciento del valor de cada uno de ellos, entre los que se encuentra la Licitación Pública 4609003-004-10, por un monto total de 68 millones 933 mil 570 pesos, por concepto de pavimentación de la avenida Morelos, la cual les fue asignado el 18 de octubre del 2010, fungiendo entonces Rodrigo como Secretario General del Ayuntamiento. Además recibieron comisiones por este contrato el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, Rafael Eduardo Rubio Quintero; un regidor y el propio alcalde.
A esa constructora le fueron asignados otros contratos, como el de la construcción del Distribuidor Vial Emiliano Zapata y el Parque Acapatzingo, por un monto superior a los 63 millones de pesos en conjunto.
Las comisiones pagadas por GRUPO WYN S.A. DE C.V. se hicieron a través de Guillermo Gayosso, quien recibió las siguientes transferencias: de la cuenta 5470544, a nombre de esa empresa en Bancomer, se hizo una transferencia el 22 de noviembre del 2010 a la cuenta 5874/3214 de Banorte, a nombre de Guillermo Gayosso, por un monto de 3 millones 200 mil pesos, quedando registrada con el número de autorización 548002.
De la misma cuenta de Bancomer y hacia la misma cuenta de Banorte se hizo una segunda transferencia el 17 de diciembre del 2010, por la cantidad de 3 millones 550 mil pesos, quedando registrada con el número de autorización 248765.
Una tercera transferencia entre ambas cuentas se realizó el 25 de enero del 2011, por un monto de 2 millones 320 mil pesos, quedando registrada con el número de autorización 0157898.
Una cuarta transferencia entre ambas cuentas se registró el 23 de marzo del 2011, por un monto de 3 millones 210 mil pesos, quedando registrada con el número de autorización 987149. El total de esas cuatro transferencias fue de 12 millones 280 mil pesos, que se supone fueron parte de las comisiones recibidas por Gayosso, su padre, Guillermo, del mismo apellido, solo por la pavimentación de la avenida Morelos, recibieron una comisión de alrededor del 22 por ciento.
Y como lo anterior, el señor Gayosso se ha dedicado a robar impunemente, por lo que hay que desglosar los muchísimos asuntos a su alrededor, para evitar que por falta de información o desmemoria, se cometa el error de votar a su favor. Tic… Tac… Tic... Tac.

lunes, 4 de junio de 2018


TERTULIA POLÍTICA

Los estertores de Bañón en el SNTE

Pedro Martínez Serrano
Crecida al amparo de su relación con Raymundo Valdivia Hernández, hasta abril pasado poderoso colaborador del dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Juan Díaz de la Torre, la secretaria general de la sección XIX, Gabriela Bañón Estrada agoniza al frente de ese organismo gremial.
        Los estertores en la señora Bañón, han provocado que vaya de tropiezo en tropiezo; que el arrebato, la deslealtad y la traición, sean su moneda de cambio. Por eso, la ofensa y el gritoneo, son cada vez más frecuentes, en agravio de sus colaboradores e iguales.
        Los signos de su caída son claros, primero en abril anterior, Juan Díaz decidió remover de la primera posición del listado de plurinominales, por la primer circunscripción a Raymundo Valdivia Hernández; se colocó en su lugar, para asegurar una curul en la próxima legislatura federal; sin el apoyo de su amante en turno, Bañón Estrada perdió también la oportunidad de ser, cuando menos, diputada local por la vía plurinominal.
          Me dicen que al interior de la sección XIX, son pocos los que aguantan a la Bañón, cuyos arrebatos y gritos, cada vez más frecuentes, sustituyen su torpeza y falta de talento, a grado tal de que ha llegado a manotear a varios de sus colaboradores, no sin antes pendejearlos, como quien se ve al espejo para buscar responsables de sus errores.
        Proclive a las relaciones de ocasión, siempre que le signifiquen beneficios, ha sido incapaz de ofrecer lealtad al proyecto al que se debe, que es al del Partido Nueva Alianza, el que representa en el terreno de la política, los intereses del magisterio. Bañón está en todos lados, menos en donde debe y está obligada a estar y a apoyar.
        En el apartado de la candidatura al gobierno, la dirigente de la sección XIX, ayuda lo mismo a Rodrigo Gayosso, que a Fidel Demédicis, ese “amor” con el que disfrutó la adrenalina de ser descubierta, hasta que lo fue en el estacionamiento de un supermercado. Olvida que el ex rector de la UAEM, el pusilánime y apocado Alejandro Vera Jiménez, es el abanderado del partido del magisterio.
        Y no sólo en el ámbito estatal, la señora Bañón le juega las contras a sus representados y a su dirigente nacional, Juan Díaz de la Torre; no, también en las candidaturas federales se ha colocado del lado de cualquiera, menos de los abanderados del partido.
        El ejemplo a la mano:
        Hace unos días, en Cuautla, Gabriela Bañón protagonizó un arrebato, un desproporcionado ridículo, cuando en un encuentro entre candidatos de la coalición Todos por México, la misma que lleva como candidato presidencial a José Antonio Meade, intentó cuestionar la presencia de representantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), partido que cedió la primera posición al senador, al aliancista Ángel García Yáñez
        El intento de dividir y alejar a las estructuras priístas de los candidatos de la coalición en la que participa Nueva Alianza, fue abucheado por los presentes, la mayoría de ellos, profesores de la región oriente.
        Así, cercanos a la cúpula magisterial en el país, me comentan que Gabriela Bañón se ha convertido en un lastre; en un estorbo para el dirigente nacional, Juan Díaz quien, para resolver el problema, piensa ya en removerla del cargo.