martes, 8 de diciembre de 2015

TERTULIA POLÍTICA

Enfermo mental

...sólo faltó que el gobernador Graco Ramírez
saliera a cuadro con camisa de fuerza
cabellos parados, como
se caracteriza a los enfermos mentales

Pedro Martínez Serrano
En los días más recientes, se acentuó la presencia de Morelos en las páginas rojas nacionales e internacionales, a consecuencia de la carnicería en que se han convertido las calles de nuestra entidad, pero también de las fosas clandestinas que se encontraron en la región oriente del estado y que, muy a su estilo, el gobernador Graco Ramírez minimiza y desdeña, con ese cinismo que lo distingue.
Evadido de la realidad, como enfermo mental que un grupo de especialistas lo diagnosticó en septiembre de 2013 (Un trastornado con poder), el señor Ramírez ordenó pagar la difusión en redes sociales de su entrevista vía satélite con el periodista Jorge Ramos, en la que se mostró como un sujeto ausente y distraído, que no es responsable de nada de lo que ocurre en el estado que presuntamente gobierna.
La entrevista con el periodista más influyente de Latinoamérica, me pareció irrisoria, en la que sólo faltó que el gobernador Graco Ramírez saliera a cuadro con camisa de fuerza y cabellos parados, como se caracteriza a los enfermos mentales. Jorge Ramos preguntaba y Graco, como merolico de pócimas mágicas, hablaba de un Morelos que no existe.
De entrada, Jorge Ramos recordó la acusación que lanzó el padre Alejandro Solalinde Guerra, director del albergue Hermanos en el Camino, al gobernador Graco Ramírez por las fosas clandestinas de la Fiscalía General de Justicia, en las que se habrían inhumado ilegalmente decenas de cadáveres. Evasivo como es, el gobernador desdeñó el tema y reiteró que no hay nada ilegal en el asunto.  
También le recordaron que su gobierno es asociado a capos del crimen, pero Graco insiste en que no hay tal, que eso fue en el pasado. Responsabilizó a los que se fueron de lo que ha sido su obligación resolver. Habló de cifras, que le fueron echadas por tierra por el periodista y se le recordó que en los 3 años y meses que van de su gobierno, nuestra entidad se ha mantenido en los primeros lugares de la estadística criminal del país.
Puntual con su machacado discurso, habló de la beca salario (programa que se aplica con recursos que otorga y etiqueta el gobierno federal), del tejido social y de la tierra de libertades en la que se vive en Morelos.
Sin embargo, más allá de lo que se empeña en repetir Graco Ramírez, organizaciones internacionales e influyentes líderes de opinión, cuestionan su gobierno y le señalan corruptelas y complicidades criminales, lo que hace que más allá de la enfermedad mental que padece, el gobierno se desmorone, con la consecuente afectación a nuestra entidad.
Con todo y los distractores y frentes que ha abierto, para golpear mediáticamente a quienes por el momento ocupan su atención: el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro y el presidente municipal electo, Cuauhtémoc Blanco Bravo, luchadores sociales y representantes de organismos no gubernamentales, siguen llegando a Morelos, para exigir el esclarecimiento del terror criminal que golpea a la población.

Con ese objetivo estuvo en Tetelcingo el Obispo Emérito de Saltillo, Raúl Vera López quien acusó que las fosas clandestinas de la Fiscalía General de Justicia (FGJ), de esta comunidad,representan una muestra más de que este gobierno tiene un mecanismo criminal para aterrorizar a la población.

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