TERTULIA POLÍTICA
Anarquía y represión
Pedro MARTÍNEZ SERRANO
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| Hernández, Messeguer y Gayosso / La mano que mece la cuna / Pura basura |
Camaleónico, oportunista y
traicionero, el propietario del grupo de choque con membrete de organización gremial,
denominado Nuevo Grupo Sindical, Bulmaro Hernández Juárez es el más fiel
intérprete de la política de la bicicleta: se agacha con los de arriba y patea
a los de abajo. La anarquía y la represión, son su moneda de cambio; herencia
que en vida, entrega gustoso a los ignorantes que tiene como hijos, Abraham y Ben Hur.
Surgido y fortalecido al amparo
de caprichos y abusos de gobiernos panistas, el Nuevo Grupo Sindical se ha sostenido como un violento y sanguinario
grupo de choque, con el que las administraciones en turno, hoy bajo las siglas
del Partido de la Revolución Democrática (PRD), la conducción de Graco Ramírez y los berrinches y arrebatos
de su hijastro, Rodrigo Gayosso,
cobran afrentas y golpean a adversarios.
Aturdidos por los decibeles de su
propia ignorancia, Bulmaro Hernández
y sus hijos Abraham y Ben Hur, no conocen límites; no aceptan
fronteras entre lo legal y lo ilegal. Para ellos lo correcto, es lo que les
deja dinero, muchísimo dinero, sin importarles arrastrar a su prole a violar leyes
y ordenamientos. Su escudo es la anarquía y el golpeteo.
En diversas ocasiones, el tal Ben Hur se ha puesto a la cabeza de
movimientos de presión a la autoridad, lo mismo para rechazar decisiones gubernamentales,
que para exigir cuotas de poder y lo he hecho, lastimando a la ciudadanía,
golpeando la sana convivencia a que estamos llamados todos los residentes de un
centro poblacional.
El arma principal de los
ignorantes y fanfarrones Hernández, Bulmaro e hijos, es el cierre de calles
a la circulación vehicular. Han cerrado parcialmente el libramiento de la
autopista México Acapulco y, con ello, provocado gravísimos daños a miles de
personas que nada tienen que ver, como tampoco nada quien con ese tipo de
hampones de sindicato.
Esos sujetos sacrifican a los morelenses,
con sus enloquecidas manifestaciones, cuando se enfrentan a la imposibilidad de
cumplir a aquellos que venden protección, lo mismo a ambulantes, semifijos, que
taxistas y empresarios en aprietos laborales, al igual que a funcionarios
corruptos, que por medio de los ignorantes y agresivos del Nuevo Grupo Sindical, cobran afrentas políticas.
El colmo del cinismo oficial, es
que los propietarios del Nuevo Grupo
Sindical, Bulmaro Hernández y sus hijos, Abraham y Ben Hur y el gobierno del estado, personificado en Rodrigo Gayosso y Jorge Messeguer, sonríen abrazados en una fotografía impresa el
lujosísimo hotel Antica Vila, cuyos
propietarios entran en apuros, cada que aparece ese tipo de gente que además de
vulgar y bajuna, exigen cortesías a condición de no emplazar a huelga y/o clausurar
el establecimiento.
Por si alguien lo ignora, el Nuevo Grupo Sindical es un negocio
particular que vende impunidad y protección, lo mismo a estafadores y asaltantes
que operan en el Centro Histórico, que a empresas en apuros laborales.
Y ante las fechorías; ante los delitos
que cometen impunemente, la autoridad se voltea para otro lado, por una sola
razón, son cómplices y golpeadores de quienes disienten con el Graco y toda la podredumbre que
representa.
Hoy, el Nuevo Grupo Sindical, volvió a agredir, a golpear y a ofender a los
habitantes de Cuernavaca. Descargó cientos de kilogramos de basura a las puertas
de oficinas municipales, en exigencia de que se cubra un adeudo del municipio,
con las empresas operadoras del servicio de limpia.
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