lunes, 24 de enero de 2022

TERTULIA POLÍTICA

Lourdes Maldonado / La furia del cacique / Congreso de Morelos

La soberbia no es grandeza sino hinchazón;
y lo que está hinchado parece grande pero
no está sano / San Agustín de Hipona
 

Pedro Martínez Serrano

La tarde noche de ayer en Tijuana, asesinaron de un tiro en la cabeza a la periodista Lourdes Maldonado López; el hecho lo denunció hace dos años en una mañanera ante el mismísimo presidente Andrés Manuel López Obrador. Hace menos de una semana, acudió a notificar a Jaime Bonilla Valdez, el embargo de su cadena de radio, televisión y redes sociales, Pacific Spanish Network (PSN), luego de que hace 9 años, la despidió en forma injustificada. La crítica número 1 del ex gobernador morenista, fue Lourdes hoy muerta de un tiro en la cabeza. Los bajacalifornianos, no sospechan de nadie, absolutamente de nadie más que del senador con licencia.

         Hace unos días también en Tijuana, el 17 de este mes, asesinaron al foto-reportero policiaco Margarito Martínez Esquivel, hijo de la periodista Eglantina Esquivel. El asunto ganó la atención de medios nacionales e internacionales. En una concentración de comunicadores, habló Lourdes Maldonado y lo hizo como fue: fuerte y claro, sin dejar de lado su tema: el despido injustificado de que fue objeto de parte de Jaime Bonilla Valdez, a quien unos días después notificó el embargo de su edificio sede de PSN.

         Hasta hace poco más de una década, trabajé en Baja California, en el entonces poderosísimo periódico El Mexicano, hoy muy venido a menos, propiedad de la desprestigiada familia Valencia (Roque, Alonso y López).

Conocí la forma de hacer periodismo en aquella entidad, un ejercicio valiente, serio y profesional. No faltaban, no faltan, ni faltarán, lo vivales que se dicen y se sienten periodistas, porque portan una charola, pero que no saben escribir, menos hablar y, ni por equivocación tienen idea de lo que es un análisis o una línea editorial.

Son basura del ejercicio periodístico, que políticos sin escrúpulos, convierten en sus limosneros, golpeadores mediáticos y sicarios de redes sociales.

La furia del cacique la traducen en campañas en contra de quienes acreditamos en los hechos, que somos periodistas, comunicadores profesionales, en desacuerdo con abusos, latrocinios y complicidades criminales, en cuyas redes, ya se multiplicaron muros, páginas, blogs y sitios web. Desde ahí, se emprenden infructíferas campañas de desprestigio en nuestra contra.

La furia del cacique, personifica hoy en el Congreso del Estado, en donde un grupo de provincianos ignorantes, que ocuparon presidencias municipales al amparo de grupos criminales, creen que son dueños del Poder Legislativo. Las fotografías que los acusan como cómplices, no fueron tomadas de casualidad, fueron impresas en recepciones que ofrecían en honor de “La Jefa”; hubo quien abiertamente aceptó, palabras más, palabras menos, que él le había entregado documentos, para que le bajara recursos para proyectos. La pregunta es sencilla; ¿con qué personalidad se veía a la señora Esther Yadira Huitrón Vázquez? Para solicitarle recursos.

Hoy desperté con la noticia, de mis amigos los periodistas y de verdad, Ignacio Cortés Morales y Carlos David Monroy, de que por órdenes de los caciques pueblerinos, hoy convertidos en diputados locales, de reputación manchada de estiércol, en el Congreso del Estado, se colocó a un pendejo que ha servido y sirve a los intereses de Graco Ramírez, a condicionar contratos publicitarios a las empresas y periodistas que los mantienen con el poder legislativo, del que hay que recordarles que son integrantes, no dueños.

Me comuniqué con uno de los reporteros mejor informado de lo que pasa en las entrañas del Poder Legislativo, uno de los que mejor conoce los temas de los asesinatos en Yautepec, las redes de complicidades y los tiraderos a cielo abierto de basura y cadáveres en Yecapixtla; el corredor criminal Sur Poniente, Miacatlán, Coatlán del Río, Mazatepec y Tetecala, pero también las complicidades y servicios a grupos criminales que se prestan en Xochitepec y me confirmó lo que leí y vi con Nacho y David:

Sí… Es Osvaldo, un cabrón payaso y desflemado, que hace ridículos en redes sociales; trabajó junto con su ahora ex esposa con Manuel Agüero en Jiutepec; es el que le ideaba “las campañas” a Gayosso en contra de los periodistas… Es un muchacho soberbio y pendejo que no entiende que como decía Víctor Hugo Bolaños Martínez (qepd): hasta entre los perros hay clase sociales; él trae atrás a un grupo de gente que se siente periodista, y a quienes le han cuestionado el tema de sus contratos, les responde con ese tono chilango de barriada: no-manito-me-ordenó-Paco-que-parara-todo-contigo-ya-ves-que-los-has-estado-atacando…

El ambiente crispado que recorre el país, en agravio de la libertad de expresión y de quienes la ejercen de manera profesional, se enrarece, los causantes son los furiosos caciques que como en nuestra entidad, piensan que en el Congreso del Estado, pueden hacer lo que les venga en gana sin consecuencias. El dinero que debe destinarse a la contratación equilibrada y justa de servicios profesionales de difusión institucional, no puede aplicarse ni a gusto de unos, ni por los huevos de otros… Tic… Toc… Tic… Toc…

No hay comentarios:

Publicar un comentario