lunes, 27 de enero de 2020


TERTULIA POLÍTICA

Legislatura fallida / Infiernos de Graco

Al perro que tiene dinero se le llama señor
perro / Proverbio árabe

Pedro Martínez Serrano
Salvo contadas excepciones, la actual es una legislatura fallida en donde, gracias a Andrés Manuel López Obrador, entró cualquier tipo de basura política, que lo mismo ha brincado de un partido a otro, que se ha dedicado a bloquear el desarrollo del Estado.
Un grupo de diputados, entre los que se encuentran Alfonso de Jesús Sotelo Martínez (presuntamente ligado a grupos criminales), Marcos Zapotitla Becerro, un desprestigiado sujeto que durante años se dedicó a estafar a residentes de la región oriente; mi amigo (en receso) José Casas González y la espuria presidenta de la Junta Política y de Gobierno, Alejandra Flores, la misma que tiene en la nómina del municipio de Cuernavaca a Luciano, su padre (a quien se detuvo a bordo de una camioneta robada) y a su pareja sentimental, responden a cualquier interés político y económico, menos al que tiene que ver con los morelenses.
Los integrantes del grupo de los 13 de la actual legislatura, con uno de los presupuestos más altos a nivel nacional por diputado, me dicen que reciben igualas mensuales que van de los 50 a los 100 mil pesos mensuales, según se trate, además de que exigen también favores para colocar en nóminas oficiales a amantes, familiares y meretrices.
Entre los que destacan como acomodaticios y oportunistas, para enchufar en nóminas oficiales a su familia, es el ignorante, fanfarrón y con pestilente tufo a hamponcete, Andrés Duque Tinoco, que representa a Temixco y dudo que conozca más allá de su “salón de fiestas” en Acatlipa; él vive en Cuernavaca en Lomas Atzingo, desde hace años. Pues su esposa Fabiola del Sol Uriostegui Alvear, es Directora del Instituto de Crédito del Gobierno del Estado; la presidenta de la Comisión de Hacienda, Rosalina Mazari Espín, tiene a su hermano Arturo, como rector de la UPEMOR.
Lo anterior, sirve como el botón de muestra, del estercolero en que han convertido al Congreso del Estado, en donde también se responde a los intereses de Graco Ramírez, quien, protegido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, hace negocios multimillonarios con su socio Jaime Bonilla Valdez, gobernador de Baja California.
El tabasqueño es el mismo que dejó minado el Estado, para provocar infiernitos cada que se le venga en gana. El Congreso del Estado, es el ejemplo más claro, además del / los partidos políticos, en cuyo registro trabajan esbirros de siempre de Rodrigo Gayosso Cepeda.
No sólo eso, el tema del transporte, fue la gigantesca zanahoria con la que quiso ganar el hijastro de Graco Ramírez; por eso, Rodrigo prometió permisos a diestra y siniestra, miles der permisos que quedaron en nivel de promesa, papeles que nunca se les formalizaron. El tema de las concesiones de autos de alquiler, provocó muertos entre el gremio,
Y hoy, activados por los mismos que los “pilotearon” ayer, se activan para exigir que se les validen permisos que nunca tuvieron legalidad alguna, por lo que creo que ahí será fundamental la experiencia de Víctor Mercado Salgado, Secretario de Movilidad y Transporte, para poner orden y aplicar mano dura, tan dura como le ley lo permita. Creo que ya basta del recurrente agravio a terceros, por la pelea de un derecho que nunca se formalizó entre los transportistas.

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