jueves, 9 de noviembre de 2017

TERTULIA POLÍTICA

Candidaturas / Estructuras priístas

Pedro Martínez Serrano
El momento electoral que vive el estado, ante la renovación de la gubernatura, mantiene nerviosos a priístas que, ante la posibilidad de repetir la alianza partidista ganadora del Estado de México, motivó que el listado de posibles se abulte lo mismo con los que ofrecen verdadera rentabilidad, que con los oportunistas que cada 3 años se acuerdan que son o tienen intereses en Morelos.
Los primeros, los que son hasta indispensables en el encarte, los que disponen de estructuras ciudadanas u organizacionales y gremiales, que les permiten ofrecer verdadera rentabilidad, son Guillermo del Valle y Matías Nazario, ambos cuentan con activos electorales estratégicos en los 33 municipios de la entidad.
Aquella rentabilidad, Del Valle y Matías (mencionados en estricto orden alfabético), la sustentan en un trabajo permanente en cada uno de los municipios, así como en la construcción de una sólida red ciudadana, a través de la cual atienden y resuelven problemas vecinales, además de que acercan apoyos a quienes los necesitan.
A los dos anteriores, insisten en incluirse personas que no tienen ninguna posibilidad de triunfo comicial; por ejemplo el señor Samuel Palma César, directivo del ISSSTE en la Ciudad de México; Jorge Meade Ocaranza, desprestigiado delegado de Sedesiol, posición que ha aprovechado para beneficiarse con comisiones de empresas contratadas y con el desvío de recursos que deberían llegar a manos de gente necesitada. Meade es un sujeto sin escrúpulos, el máximo exponente de la política de la bicicleta: patea a los de abajo y de agacha con los de arriba.
A los anteriores, hay que sumar a las señoras Lizbeth Hernández Lecona, hoy desteñida y opaca senadora que ha dado más vergüenzas que satisfacciones a los morelenses, igual que a la diputada federal Rosalina Mazari, una persona majadera, altanera y vengativa, que difícilmente va más allá del perímetro de su distrito. En ambos casos, creen que ser mujeres, les da derechos de paridad, que sustituyen rentabilidad, capacidad y trayectorias.
Incluir nombres adicionales, creo que resulta ocioso.
Quiénes para Cuernavaca
En un ambiente enrarecido por la apertura a las candidaturas ciudadanas, hoy Cuernavaca se encuentra secuestrada en el arrebato de ingenuos y oportunistas que, sin la menor posibilidad, se sienten los redentores, los salvadores de la problemática a que ha sumergido nuestra ciudad el enloquecido Graco Ramírez (a quien por cierto, investiga un grupo de inteligencia fiscal por actos de enriquecimiento ilícito que incluye un piso en el Centro de Madrid, España).
Hoy las redes sociales se inundan de jovenzuelos oportunistas, marcados por el desprestigio familiar o personal que se ofrecen como los salvadores.

Lo que es cierto, estoy seguro que el próximo presidente municipal de Cuernavaca, saldrá de la candidatura de un partido. Por el combinado partidista que encabece el PRI, Alfredo Gutiérrez Truhart, el popularísimo Afie Gutiérrez, Víctor Saucedo Perdomo y/o Claudia Martínez Lavín; por Morena, Alejuandro Mojica o Javier Bolaños, de concretarse su movimiento al partido de Andrés Manuel; por el Frente Amplio, PRD, PAN y MC, la diputada Beatriz Vícera Alatriste, su homólogo Jaime Álvarez y/o el secretario del Trabajo, Francisco Santillán quien, por cierto, ha sido golpeado con rudeza por la señora Gabriela Bañón, la difamadora estrella de la sección XIX del SNTE. En ese frente la que no tiene ninguna posibilidad, con todo y el desvío de recursos en que incurre para promoverse, es la tal Teresa Domínguez, directora del Instituto de la Mujer. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario