TERTULIA POLÍTICA

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Lobo / cirugía / casas / motos / dólares

Pedro Martínez Serrano

Acabaron los días de pedir fiado con pagos chiquitos; quedaron atrás los tiempos de las botas rotas, como también los litigios para echarlo del viejo edificio en el que nunca pagó la renta; es también ya una afrenta que le recuerden la vieja y destartalada motocicleta en que se sumaba a las rodadas.

Hoy Francisco Antonio Villalobos Adán, posee un par de residencias en Acapulco, una colección de 7 motocicletas, la más barata de ellas, valuada en más de medio millón de pesos; el Lobito es otro, luego de que se sometió a una costosa cirugía estética, para que le formaran el vientre de lavadero; le quitaran la papada, le afinaran los detalles de la nariz y le abultaran las nalgas.

La operación a que fue sometido, fue a fines de abril, principios de mayo en el mejor hospital de México, según la prestigiada revista América Economía, donde desde 2011 se ha califica a Médica Sur como el mejor de su tipo a nivel nacional.

El licenciado Villalobos, como lo llama el personal del pomposo nosocomio, dejó como dirección particular los números de 2 lujosos departamentos en el complejo comercial y habitacional, Averanda, ubicado sobre la autopista Cuernavaca-Ciudad de México, de los que me dicen que también es dueño.

Previo a ser intervenido, me deslizó una fuente altamente confiable de la oficina de Comunicación Social del Ayuntamiento de Cuernavaca, el alcalde polizonte, hoy amiguis con José Luis Gómez Borbolla, intermediario en la compra de las despensas, a los hermanos Valverde, se hizo grabar un paquete de videos, para mantenerse presente mientras guardaba reposo de la intervención quirúrgica de varias horas a que fue sometido.

El tema de las despensas se arregló desde mediados de abril y, por eso, se apresuró la entrega de un camión cuyo contenido era de utilería, sólo para la toma de fotografías y videos. La idea de hacer los videos me dicen que se la dio mi amigo Gómez Borbolla, hoy asesor del presidente municipal Villalobos Adán.

El informante que me llamó hoy, me confió dos cosas: una, el presidente municipal está haciendo recorridos muy cortos, porque anda fajado; fue con miedo y a distancia a la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador y, dos, el señor Lobo, tiene cuenta bancaria en dólares en el Chase Manhattan Bank, en su sede en Nueva York.

Me dicen que el director de panteones, platicó entre sus ayudantes, que él se encargaba de recibir la comisión que entrega Daniel Miranda, por la concesión de la basura y, cada mes, o cuando es necesario, ir a cambiar el dinero en dólares. “El Lobito ya no usa pesos”, presume a los pelados que le rodean, para privilegiar la amistad y confianza del alcalde en él.

Así, mientras la gente en Cuernavaca, en las colonias populares y los mercados, en especial el López Mateos, moría a consecuencia del coronavirus, el frívolo sujeto que despacha como alcalde, “hacía su cuarentena” en la nueva sección del legendario fraccionamiento Las Brisas, en Acapulco. Se recuperaba de la costosa intervención quirúrgica.

Hoy, durante la gira presidencial, en la conferencia mañanera,  me dicen que estaba incomodo, pues todavía trae parches en las nalgas, que le evitan estar sentado por mucho tiempo.