Intervención de la Regidora Karla Jaramillo Sánchez
Sesión del Cabildo de Cuernavaca / Jueves 3 de noviembre de 2016
Cuauhtémoc Blanco
Bravo es un hombre muy importante,
pero tiene la responsabilidad de trabajar por Cuernavaca.
Este Cabildo compañeros, tiene la facultad, la obligación, la entereza
de revisar el trabajo y las consecuencias de cualquier funcionario.
Digo Funcionario, el que crea que por
ser amigo tenemos que aguantarlo, está equivocado
pero tiene la responsabilidad de trabajar por Cuernavaca.
Este Cabildo compañeros, tiene la facultad, la obligación, la entereza
de revisar el trabajo y las consecuencias de cualquier funcionario.
Digo Funcionario, el que crea que por
ser amigo tenemos que aguantarlo, está equivocado
Quien revisara el
Orden del
Día de esta sesión de Cabildo, pensaría: mira, que Cabildo tan eficaz, citan a sesión solo para recibir
correspondencia. Lamentablemente, la realidad es otra, a escasos 50 y tantos días de cumplir un año
en ejercicio, me
apena reconocerlo, los resultados son totalmente
negativos.
La ciudad, nuestra responsabilidad, se encuentra totalmente abandonada por esta administración ─y cada quien
sabemos en este Cabildo nuestra parte de culpa
aún por omisión─, que si bien es cierto
heredó
condiciones difíciles, no ha asumido cabalmente su responsabilidad, dedicándose
a todo, menos a solucionar los problemas de
la gente.
En lo personal y
lo
digo sin tapujos, aprecio al señor Presidente Municipal
Cuauhtémoc Blanco Bravo, y
lo
considero un hombre de buenas intenciones, que ha aprendido a querer a Cuernavaca y entender la importancia de su encomienda, sin embargo ─lo digo con respeto─,
no
la conoce. Tampoco conoce los rincones de la
administración municipal y de
eso, se han
aprovechado
unos
cuantos.
Lo grave
del
asunto, es que mientras Cuernavaca se hunde
en la
oscuridad,
los baches, la falta de agua, mercados públicos agonizando, jardines en penumbras,
basura por todos lados, los anteriores salvadores de Cuernavaca, léase hermanos Yáñez;
los actuales, tan perniciosos como los otros,
pero enarbolando la
causa cuauhtemista en su gran pleito
con
los ladrones, ya idos.
Estos, la nueva gerentocracia municipal,
alzando la voz e inflamando el
pecho, gritan y gesticulan: con usted, hasta la cárcel señor Presidente, pero en los pasillos proclaman
soterradamente: ¡Aquí, yo decido
cuándo y de qué, se
entera el
señor Presidente!
A estos señores ─todos sabemos quiénes son─, les digo sin la menor confusión.
Es hora de actuar con honestidad, es hora de que revisen,
si realmente le sirven a Cuernavaca y en consecuencia al señor Presidente Municipal.
Ustedes señores,
son
funcionarios públicos y están sujetos a demostrar su capacidad.
La ciudad, requiere del
esfuerzo de todos. ¿No la ven? No les da pena, desconocer lo más básico de la administración municipal. Como dijo el señor
Martí: Si no pueden, renuncien. Ya no dañen
al amigo que les dio la oportunidad,
estamos a punto de
cumplir un
año.
No es cuestión de colores, sabores o nacionalidades. Decir Me fregaste o
aquí señores, se trata
de una
sola palabra: CAPACIDAD.
Pero bueno, hablamos
de incapacidad manifiesta, agravada con toma de
decisiones que han dañado las finanzas municipales. Se fueron los ladrones,
se quedaron los incapaces.
En próximos días, deberemos analizar el
Corte de Caja anual, dirían los enterados el
bueno, que da posibilidad de penas administrativas, pero también penales. No podemos refugiarnos en una actitud de alma en pena agobiada por las grandes deudas heredadas,
sólo argumentando que La administración está en
bancarrota.
¿Sesión para recibir correspondencia?
Ojalá esa correspondencia, fueran los contratos de la basura,
los contratos de las donaciones, los contratos de
proveedores y
prestadores de servicio. Ojalá fueran los pagos millonarios a deudores selectivos, esos que
dejan
comisión.
Que sirvan estas fechas señor Presidente, para evaluar el funcionamiento de
barones
de la burocracia que lo engañan a usted y lo peor a la sociedad. Yo lo aprecio señor Alcalde, pero a mi ciudad, a Cuernavaca, la amo, la respeto y en la medida
de mis fuerzas, la cuido.
Cuauhtémoc Blanco Bravo es un hombre muy importante,
pero
tiene la responsabilidad de trabajar por Cuernavaca. Este Cabildo compañeros, tiene la
facultad, la obligación, la entereza de revisar el
trabajo y las consecuencias de cualquier funcionario. Digo Funcionario, el que crea que por ser amigo tenemos que aguantarlo, está equivocado.
Aquí nos paga el pueblo de Cuernavaca, nadie más. A este pueblo habremos de rendirle cuentas.
Los
otros, esos que luego nos hacen esperar afuera de sus oficinas, que deciden sobre nuestro personal
y nuestros derechos, a esos, son momentos de revisar su
trabajo
y tomar decisiones con
base en ello.
Que no se confundan, son empleados que deben cumplir su tarea, el Corte de
Caja
está
a la puerta, es hora de
que la
información fluya y fluya bien.
A usted señor Presidente Municipal Cuauhtémoc Blanco Bravo, le expreso
mi compromiso de apoyar su trabajo por Cuernavaca, que no lo confundan estos señores. Estas medidas son
también en
su beneficio, pues usted es honesto.
Ellos: ¿Quién sabe?
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