lunes, 12 de junio de 2017

TERTULIA POLÍTICA

Cuernavaca
(…) sigo creyendo que de los pocos perfiles ciudadanos 
que ofrecen la posibilidad de ir a la contienda y ganar la alcaldía,
es el que podría encabezar mi amigo el periodista
y comerciante Javier Jaramillo Frikas quien, estoy seguro, encauzaría
el ordenamiento financiero y administrativo del ayuntamiento
Pedro Martínez Serrano
Nuestra ciudad está en crisis; vive una de sus peores épocas en el apartado de obra pública y prestación de servicios. El abandono que registra lo acreditan las calles destrozadas por las que transitamos, los montones de basura que se acumulan a cada esquina, la escasez de agua que golpea a los vecinos de todas las colonias y la inseguridad, cuyos nocivos efectos nos alcanzan a todos.
La carencia de servicios públicos y abandono que se vive en la ciudad capital del Estado, es consecuencia del saqueo desmedido a la que fue condenada por el ayuntamiento que presidió Manuel Martínez Garrigós y, quien lo sustituyó en el cargo, el escurridizo y ladrón abogado Rogelio Sánchez Gatica.
Hoy la situación financiera del ayuntamiento de Cuernavaca bordea en el colapso, a consecuencia de que sus ingresos propios, vía impuestos, especialmente predial y participaciones que entrega la federación y el estado, no le alcanzan casi ni para cubrir su abultadísima nómina, apretujada de aviadores y parásitos que no hacen más que cobrar.
Con todo y lo anterior, la presidencia municipal de Cuernavaca es deseada por muchos, muchísimos militantes de distintos partidos, pero también por ciudadanos que se creen con el merecimiento y el talento para encabezarla, más allá del prestigio o desprestigio que arrastren. Todos se presentan como los grandes salvadores de la ciudad.
Y como ocurre en todos los casos, entre los aspirantes a la presidencia municipal de Cuernavaca, hay mucho iluso que cree que su perfil es el mejor, que llegado el momento dispondrá del apoyo electoral, sin embargo es más la ocurrencia y la autopromoción, que el reconocimiento social.
El rescate financiero y administrativo, junto con la reingeniería laboral en el ayuntamiento de Cuernavaca, parece un objetivo lejanísimo, casi imposible, si consideramos que nadie de los que están a la vista en busca de la presidencia municipal, ofrece lo que en realidad se requiere: honestidad, compromiso social, talento y energía para ordenar el municipio.
Entre quienes se mencionan con posibilidad de contender por la presidencia municipal, se incluye entre otros, a Maricela Velázquez Sánchez, Alberto Mojica Linares, José Luis Urióstegui Salgado, Carlos Alaníz Romero, Francisco Santillán y unos 20 personajes más que se suman a la lista de quienes quieren, aunque no así los que pueden llevar a buen puerto el encargo.
En el mismo sentido, hay que anotar que hoy la oportunidad de conseguir una candidatura, responde a factores e intereses de todo tipo, menos los que tienen que ver con la realidad política y económica del ayuntamiento de Cuernavaca.
Ejemplo de lo anterior, es el hecho de que, si los partidos van solos a la contienda, entonces en el PRI, la candidata tendrá que ser Maricela Velázquez, no veo a nadie más con tamaño para ganar; en el PAN, habría que ver qué dice Adrián Rivera; en el PRD, si Rodrigo Gayosso le cumple a Beatriz Vicera, entonces ella sería la candidata y, por el lado del Partido Encuentro Social (PES), me parece que quien sería su mejor candidato, con verdadera posibilidad de imponerse a sus adversarios, casi en el mismo nivel de popularidad que Cuauhtémoc Blanco, es el ex alcalde y ex gobernador Sergio Estrada Cajigal.
Comentario aparte merece el Movimiento de Regeneración Nacional, ese espejismo político denominado Morena, en donde todo camina en respuesta a los caprichos y arrebatos de Andrés Manuel López Obrador, cuyos aspirantes también cifran su esperanza de triunfo en la popularidad del tabasqueño.
En contraste con lo anterior, hay quienes hablan de la posibilidad de alianzas partidistas, la más comentada, la que tienen que ver con el PRI, que iría junto con el PES, Nueva Alianza y Verde, en cuyo caso, la selección del candidato se daría entre Maricela Velázquez, Francisco Santillán y el mismo Sergio Estrada.
Y, enfrente, hay quienes arrullan la versión de una coalición entre el PAN y el PRD, cuya ecuación política complica la selección del candidato o candidata, porque habría que ver cuál de los organismos electorales cedería la titularidad de la fórmula.

Frente a todo lo anterior, sigo creyendo que de los pocos perfiles ciudadanos que ofrecen la posibilidad de ir a la contienda y ganar la alcaldía, es el que podría encabezar mi amigo el periodista y comerciante Javier Jaramillo Frikas quien, estoy seguro, encauzaría el ordenamiento financiero y administrativo del ayuntamiento.

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