viernes, 7 de octubre de 2016

TERTULIA POLÍTICA

Basura de Cuernavaca

Pedro Martínez Serrano
Cuernavaca nuestra ciudad de la eterna primavera, vive los peores años de su historia, con un ayuntamiento secuestrado por intereses de todo tipo, menos los de la ciudadanía y un presidente municipal, Cuauhtémoc Blanco, que ha resultado un fiasco, un pelele que primero se hincó a los intereses de Julio y Roberto Yáñez y, ahora, sirve atingente a los caprichos de Rodrigo Gayosso, el hijastro ladrón del todavía gobernador, quien ordena por medio de un par de gachupines (RAE: Español establecido en México o Centroamérica) que no tienen otro propósito de que saquear las raídas arcas municipales.
Con todo y la torpe y servil operación política y mediática, a cargo de José Manuel Sánz y el locutor Juan José Arrese, la basura se acumula en el ayuntamiento, lo mismo con improvisados y ladrones que han sido enchufados a la nómina, que con la tramposa defensa de asuntos de orden legal, a través de los cuales sólo se ponen en línea para embolsarse millones de pesos en agravio de la ciudad y de quienes aquí vivimos. Que es lo que menos les importa. Ellos en lo suyo y a lo suyo.
Lo anterior viene a tema, porque el estercolero en que han convertido el ayuntamiento, aumenta la pestilente sospecha a componenda, entre autoridades del poder judicial, hoy en manos de la panista María del Carmen Verónica Cuevas y el representante legal de la Promotora Ambiental (PASA), Guillermo Pasquel, apoderado legal de la firma regiomontana, pero bien-bien, cancerbero de los intereses de quienes en realidad mantienen la sociedad en la concesión del servicio de recolección, traslado y confinamiento de los desechos sólidos, el corrupto diputado federal panista, Javier Bolaños Aguilar; el ex gobernador Sergio Estrada Cajigal y, sorpresa, el tesorero municipal, Alejandro Villarreal Gasca.
El caso del litigio ganado por PASA, en el que me aseguran que ya se montaron José Manuel Sánz y quienes ahora lo aconsejan, con la anuencia del pelele Cuauhtémoc Blanco, condena al ayuntamiento, según dice el abogado Pasquel a pagar 300 millones de pesos, aunque en el terreno de los hechos, el adeudo que se ordena cubrir es de 16 millones de pesos, más intereses y gastos de cobranza.
Para entregar el premio otorgado a PASA por la autoridad judicial, por abandonar el servicio, para ejecutar la sentencia, el ayuntamiento tendrá que resolver primero los adeudos que tiene con quienes han mantenido la limpia y recolección de desechos en los años más recientes, como Daniel El Torcido Miranda, a quien se adeudan casi 50 millones de pesos; a Emilio Suárez, poco más de 6 millones; a la operadora del relleno sanitario, algo así como 8 millones de pesos y, alrededor de 20, al tal Ismael Mojica González, éste último socio y cómplice de los ingenuos hermanos Yáñez Moreno.
Así las cosas, la nueva crisis a que el Tribunal Superior de Justicia ha arrinconado al ayuntamiento, impone no sólo el pago de los pretendidos 300 millones de pesos del abogado de PASA; no, para que quienes hoy están en el tema, incluidos los Yáñez, por medio de Mojica González, se retiren y devuelvan el servicio a la empresa de Javier Bolaños, Sergio Estrada y Alejandro Villarreal, primero se les tendrá que cubrir su adeudo de algo así como 84 millones de pesos. Y de dónde?
Pero los riesgos de la letra chiquita del contrato de concesión, en la que se ocultan los abusos y las raterías, impone al ayuntamiento la obligación de ajustar tarifas del pago del servicio, hasta por el aumento en la cotización del dólar, como sin duda pretenderán que suceda. Cuando se firmó el contrato de concesión, por 20 años, se estableció que en caso de que aquella moneda aumentada por encima de la inflación, entonces en ese porcentaje, se ajustarían los costos del servicio. El dólar estaba entonces en 12 pesos por uno. Hoy supera los 18; ocasionalmente supera los 19 pesos por un dólar.
Esa Cueva de Alí Babá y sus españoles, en que se convirtió el ayuntamiento de Cuernavaca, por causa de los hermanos Yáñez Moreno, está a punto de explotar; le han metido presión de más a sus arcas y se ha extraviado la operación política.
Ese resolutivo que favorece a PASA se tenía listo hace más de dos meses, pero se dio a conocer hace un par de días, me dicen que luego de que se amarraron los acuerdos entre los representantes de la empresa, que ya de regiomontana no tiene nada, es decir, Javier Bolaños, el corrupto presidente de la Mesa Directiva de la Cámara Baja; Sergio Estrada, Alejandro Villarreal y su jefe, José Manuel Sánz quien, por cierto, ayer mismo se apresuró a ofrecer, atento y servicial, que Cuauhtémoc Blanco acatará la sentencia judicial emitida por el Juzgado Tercero Civil y Mercantil.
En conclusión los asesores, los acomedidos y los encargados de la operación del ayuntamiento, parecen entretenidos en destazar el cadáver en que convirtieron al municipio y, con la venta de sus pellejos, seguirse enriqueciendo.

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