viernes, 14 de octubre de 2016

TERTULIA POLÍTICA

Rodrigo Gayosso es un muchacho enloquecido;
antes, borracho y extraviado por el
consumo de alguna sustancia, lloriqueaba
y escandalizaba a la puerta de jovencitos
a su servicio; hoy, perverso como es,
compra y vende conciencias; extorsiona
y soborna; su desmedida ansia de poder lo
ha llevado a construir una feroz red
de complicidades que todo destruye,
que a todos agravia, que
a todos divide, la nómina Gayosso



Perversidad, basura y complicidades

Pedro Martínez Serrano

La convulsión política y social que vive Morelos, pero también el gravísimo desgaste de sus instituciones en los tres órdenes de gobierno, además del enfrentamiento entre los diferentes sectores ciudadanos, tiene un solo origen: la corrupta perversidad que mueve al voraz vice gobernador, ese muchacho raro, mustio, corrupto y vengativo, Rodrigo Gayosso, el hijastro de Graco Ramírez que ya no respeta a nada ni a nadie; a él mismo, al mismísimo tabasqueño ha pendejeado y amenazado.
Y aunque su destino es la cárcel, en tanto llega ese momento, Rodrigo sigue dañando a nuestra entidad y a quienes aquí vivimos. Impone porcentajes de comisión a todo y por todo, asigna contratos de obra, en los que gana más él que las empresas, designa y remueve funcionarios, lo mismo en el organigrama de la Nueva Visión, que en los ayuntamientos y/o cualquiera de los tres poderes. Su peligrosa telaraña envuelve también a partidos políticos. Todo se mueve a su gusto y conveniencia.
Lo anterior es resultado del peligroso libertinaje que le permitió Graco en el manejo y control de los asuntos del Estado; abusos de poder y saqueo que lo llevaron a construir una venenosa telaraña a la que casi nadie escapa: la Nómina Gayosso, en la que a través de las cúpulas de partido; cabecillas de grupos políticos, diputados federales y locales, extiende su veneno hasta el último rincón de la entidad.
Ejemplo:
Gayosso manipuló a Graco para enfrentar al ayuntamiento de Cuernavaca, hasta someterlo aun pisoteando la ley; así consiguió primero, el control de los recursos que destina la federación a la seguridad pública municipal. Se impuso a rajatabla el Mando Único.
El tema motivó un rabioso enfrentamiento entre el gobierno y los cabecillas del ayuntamiento, entonces al mando de los desprestigiados y corruptos hermanos Roberto y Julio Yáñez, quienes habían asumido el control de la nómina y, desde luego, de la tesorería. Sobra decir que el futbolista Cuauhtémoc Blanco respondía a las instrucciones de los mexicalenses. Incluso autorizó a Roberto a trazar las rayas que emplea como firma, para dar cauce a temas que tenían que pasar por su aprobación.
Para conseguir el control del municipio y de los escasos recursos que llegan a sus arcas, Rodrigo echó mano del vendedor de publicidad de origen español Juan José Arrese García (el Chorlito), a quien ocupó para acercarse al también gachupín (Real Academia Española: Español establecido en México) José Manuel Sanz, representante de Cuauhtémoc, para generar los acercamientos que hoy, a todos ellos les han redituado ganancias y posiciones en la nómina municipal.
A su vez, Gayosso operó la relación con los corruptos hermanos Yañez, a quienes primero sacó del municipio y ordenó correr a toda su gente, para luego enfrentarlos con el alcalde Blanco Bravo.
En ese raqueteo de intereses dentro del ayuntamiento que incluye el control de la nómina, la asignación de contratos y el pago de facturas tramposas a sus incondicionales y amigos, Gayosso le abrió un nuevo frente a Cuauhtémoc: la resolución a favor de la Promotora Ambiental (PASA), a través de la cual obliga al municipio a devolverle el servicio de recolección, limpia y destino final de la basura.
El tema que adelantó Gayosso a sus cercanos desde mediados de julio, se le diluyó en las manos, a causa de la torpeza de sus operadores, incluida la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, María del Carmen Cuevas López y el abogado de PASA, Guillermo Pasquel.
La primera trató de presionar al municipio, se apresuró a declarar: El conflicto entre la Promotora Ambiental S. A. de C. V (PASA Cuernavaca) y el Ayuntamiento capitalino es un asunto juzgado que deberá de cumplimentarse para atender la resolución, el segundo, voraz como es, afirmó en conferencia de prensa, además de muchas situaciones abusivas, que el municipio tendría que pagarle 300 millones de pesos, por gastos, daños y perjuicios.
Una locura el tema; especialmente cuando el ayuntamiento está en bancarrota, lo que no importó a Gayosso que atizó el asunto, con un solo objetivo, crucificar las finanzas del ayuntamiento y, de paso, agenciarse una jugosa comisión, luego de dar cauce a algún recurso que permitiera al municipio conseguir dinero para cumplir el ordenamiento judicial.
Y aunque todo parecía marchar correctamente para el hijastro de Graco y sus cómplices en el tema, hubo quien alertó la obligación de la autoridad municipal de echar mano de los recursos legales a su alcance. El asunto se le diluyó y obligó al jurídico, en este caso si, a estar atento al avance del proceso que, a decir de expertos puede mantener de rodillas durante años, a los abusivos empresarios de PASA, que intentan cobrar por un servicio que no han prestado.
El tema de la Nómina Gayosso es largo y tiene muchas rutas, todas con un mismo destino: embolsarse con facilidad dinero negro, con el que compra conciencias y subasta espacios de poder.
La estrategia del caos diseñada por Gayosso, asesorado por expertos en el manejo de crisis y estrategas en campañas políticas de medio pelo, ofrece un largo desglose que debe continuar, porque todo ensucia, todo apesta y todo golpea. Ahí están los temas del Instituto de Crédito de los Trabajadores del Estado, el Morebús, refinanciamientos y nuevos préstamos; la sentencia misma de PASA, que se aprovechan para limpiar el fracaso de su plan Cruz Azul y sus plantas y mandan al Congreso una iniciativa para adueñarse de la operación de los servicios de limpia y destino final de la basura en los 33 municipios y, al igual que la seguridad pública, disponer y distraer dinero de los ayuntamientos, como mejor le plazca al tal Gayosso.
No solo esconde el robo de los 238 millones de pesos de la Planta de Xochitepec, fabrica un caos con el tema PASA y, obvio, surge como salvador con su propuesta y de paso, exhibe a los alcaldes como ineptos y corruptos. Así fue con Manuel Martínez Garrigos y así será con Cuauhtémoc Blanco.
La opinión pública debe conocer los tentáculos de la Nómina Gayosso que alcanza lo mismo a periodistas corruptos, diputados, dirigentes de partidos, alcaldes, regidores y actores políticos en la banca. También hay empresarios y “líderes sociales” que se benefician por medio de programas de asignación de recursos a fondo perdido

Se trata de un verdadero escándalo. Millones y Millones, que seguramente son de los ahorros de la doble "G", los siniestros Graco-Gayosso.

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